Descanse en paz, Presidente.

Adolfo Suárez, Presidente del Gobierno de España, 1977-1981

Muere el primer presidente de la democracia actual. Muere el hombre, el del consenso. El político que unió las dos Españas, a los de izquierda y a los de derechas, para comenzar una democracia, junto con el rey Juan Carlos I, que nos ha llevado hasta nuestros días. Muere quien legalizó el Partido Comunista tras la dictadura de Franco e hizo que su líder, Santiago Carrillo, pudiese volver a su país. 

Para los que nacimos en 1975 nos pilló el gémen de la transición española y un Francisco Franco que agonizaba. Recordamos el 23F por las veces que lo hemos visto en televisión. Tampoco tenemos memoria de lo que fué toda esa época gloriosa para una España en libertad en la que la política democrática a la se enfrentaba era acogida con ilusión y esperanza por los ciudadanos. Suárez fué el hombre y el político que estuvo en el momento idóneo en el lugar adecuado. ¿Qué político de esta nueva era sería capaz de hacer lo queel hizo? Por supuesto que el actual Mariano Rajoy no y tampoco el anterior, Rodriguez Zapatero. Ni que decir de Aznar. En cuanto a Felipe González hizo lo que tuvo que hacer mientras estuvo.

Sí recuerdo vágamente una noche de 1978; era una noche como otra cualquera, en nuestra calle no pasaba nada, no se oía nada que no fueran los gatos o los grillos en verano. Pero esa noche sería distinta, muy distinta. El silencio de esa noche se vió turbado por muchos gritos de hombres que corrían calle arriba como alma que lleva el diablo, vociferaban gritos antifranquistas, la libertad era una de las palabras que más se oía. Uno de ellos, a los vecinos que habían salido a comprobar de donde provenían esos gritos, les aconsejaban que se metieran en casa porque los que venían tras ellos no se andaban con chiquitas. Era la la guardia civil franquista los que corrían tras estos valientes con porras en las manos y alzando en voz alta el alto a la guardia civil de Franco. Esa noche me impacto tanto que lo recuerdo como si fuese ayer. Presencié ese momento junto a mi madre y mi abuela materna, tras una ventana que daba a la calle con la persiana echada y con la luz de la habitación apagada, hasta que mi madre me dijo que nos fuéramos para dentro porque esa noche se podría complicar.

Adolfo Suárez, Presidente del gobierno de España, 1977-1981

Si hacemos historia, Suárez era un perfecto desconocido para una mayoría del pueblo español allá por julio de 1976 cuando el rey Juan Carlos I le encargó la formación del segundo gobierno de su reinado y el consiguiente desmontaje de las estructuras franquistas.  No obstante y con no pocas dificultades, fue capaz de reunir a un grupo de políticos de su generación que habían llegado a las convicciones democráticas por diversos caminos. Supo aglutinar, junto a falangistas «conversos» como él, a socialdemócratas, liberales, democristianos, etc. y, entre 1976 y 1979, desarbolar el régimen franquista con la complicidad de las fuerzas antifranquistas como el PSOE y, especialmente, del Partido Comunista de España y su líder, Santiago Carrillo, que denominó a Suárez como un "anticomunista inteligente".

Durante su primer mandato, de 1977 a las elecciones del 1 de marzo de 1979, se consensuó y elaboró el texto de la Constitución que fue refrendado por los españoles el 6 de diciembre de 1978".

El 23 de marzo muere D. Adolfo Suárez González a los 81 años de edad y tras una larga enfermedad degenerativa. 

Descanse en paz, Presidente.